martes, 8 de enero de 2013

Propiedades del agua...



Fuente: Wikimedia Commons
Como seguramente se ha repetido hasta la saciedad, el agua es una sustancia extraordinaria y fascinante que tiene unas propiedades fisico-químicas que la hacen increible, maravillosa y esencial para la vida y los procesos vitales. No voy a abundar en las conocidísimas disolvente universal, tensión superficial, cohesión, adhesión, densidad máxima a 4ºC, medio de transporte .... y sí que me fijaré en tres de ellas para resolver la cuestión que se plantea después:

 Calor específico: el agua absorbe (o cede) 1 cal por gramo de agua al aumentar (o disminuir) su temperatura 1 ºC.  Este calor que absorbe el agua se emplea en romper puentes de hidrógeno entre las moléculas de agua en lugar de aumentar la velocidad de las mismas (recuerda que a mayor temperatura, mayor velocidad de las partículas), cuando la temperatura baja se forman enlaces de hidrógeno adicionales y se libera energía en forma de calor.

Fuente: http://www.profesorenlinea.cl/fisica/Materiayenergia.htm

Calor de vaporización: el agua requiere 580 cal para pasar de estado líquido a vapor (1 gramo).  Esta cantidad de energía tan elevada se necesita para romper todos los puentes de hidrógeno que mantienen a las moléculas en estado líquido.

Puentes de hidrñogeno (líneas discontínuas) entre moléculas de agua. Fuente: Wikipedia
.  

Conductividad: es la capacidad para conducir (no covección) el calor.  En el agua es elevada.

Las tres propiedesdes del agua citadas anteriormente hacen del agua un excelente regulador térmico tanto para los seres vivos individuales (compuestos mayoritariamente por agua) como a nivel global.

Y ahora viene la preguntita:  ¿Cómo se explica que las hojas de una planta al sol estén generalmente más frescas que las piedras vecinas?

En el caso de las plantas expuestas al Sol, el agua contenida en las mismas hace que la temperatura se mantenga constante, por una parte debido al calor específico se amortiguan los cambios bruscos de temperatura con lo que pueden resistir cambios de temperatura exterior sin apenas variar la temperatura propia,  y por otra parte debido al mecanismo de evaporación pueden refrigeran su superficie al transpirar agua (en la evapotranspiración de agua en los vegetales es necesario tomar mucho calor y, por tanto, el organismo se enfria).
 

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